¿Eres un autónomo y tienes algún cliente despistado que no te ha pagado una factura o deuda? ¿Te han hecho un contrato laboral y tu jefe no te paga lo estipulado? ¿Tienes una lista de morosos con deudas por cobrar?
Son innumerables las ocasiones en las que un trabajador por cuenta ajena o propia, que ha puesto todo su empeño y esfuerzo en las tareas encomendadas por parte de su jefe/cliente, se encuentra a final de mes con una alarmante noticia: no le han pagado. Y pasan los días. La cantidad no llega y la deuda va haciéndose más grande.
La buena fe del trabajador habitualmente le hace confiar en los plazos marcados por su jefe/cliente, pero va observando el paso del los días con acritud porque el dinero fijado en el contrato no llega.
Y es que desgraciadamente, la lacra de los deudores va en aumento. Especialistas en presentarse como solventes y buenos pagadores, algunos morosos no encuentran la acción de pagar entre sus prioridades (la de seguir exigiendo, por ejemplo sí).
Por eso, si tras haberle solicitado las cantidades que te debe reiteradamente, no has obtenido respuesta, no lo dudes: RECLAMA.
LA LEY DE MOROSIDAD
En los últimos años, la Ley de Morosidad ha experimentado una importante modificación que ampara a los impagados. El 7 de julio de 2010, fija desde 2013 unos plazos máximos de pago en las operaciones comerciales de 60 días para las empresas privadas y de 30 días para las Administraciones Públicas, a contar a partir de la entrega de los productos o prestación de los servicios.
En los casos en los que se comercializan productos de alimentación frescos y perecederos, se fijó el plazo máximo de pago en 30 días desde el año 2010.
RECLAMA LO QUE TE PERTENECE, RECLAMA TUS IMPAGOS
Desde Coraza Legal, contamos con un despacho especializado en las reclamaciones por impagos de cualquier índole. Por eso, si te has visto afectado por un impago, no lo dudes y reclama. Puedes ponerte en contacto con nosotros y te haremos un estudio de viabilidad totalmente gratuito para determinar las posibilidades de éxito. La Ley te ampara.